En el marco de una relación laboral, puede ocurrir que el trabajador sea declarado en incapacidad permanente. Esto supone que, a causa de un problema de salud, el trabajador no puede seguir desempeñando con normalidad las tareas de su profesión. Esto plantea una pregunta: ¿qué ocurre con el contrato de trabajo en estos casos?
La cuestión es especialmente relevante en el grado de incapacidad permanente total, ya que no impide trabajar en general, pero sí desarrollar la actividad habitual del trabajador. ¿Significa esto que la empresa puede extinguir el contrato de manera inmediata? ¿O existen otras alternativas que se deban considerar primero?
Vamos a responder a estas preguntas conforme a la regulación actual de esta situación en el Estatuto de los Trabajadores.
