Cuando un trabajador comete ciertas faltas graves, puede ser despedido por causas disciplinarias. Y en estos casos, a menudo surge la duda de si se tiene derecho a cobrar indemnización una vez realizado el despido.
Podemos ayudarle
En Civic Abogados somos abogados especialistas en despidos en Madrid. Si necesita un despacho laboralista con amplia experiencia, contacte con nosotros. Le ayudaremos.
Contacte con nosotros¿Qué es el despido disciplinario?
El despido disciplinario es aquel que decide el empresario de forma unilateral, por causas que suponen un incumplimiento grave y culpable del contrato por parte del trabajador.
Se encuentra regulado en el artículo 52 del Estatuto de los Trabajadores, que establece los posibles incumplimientos contractuales que dan lugar al despido disciplinario:
- Las faltas repetidas e injustificadas de asistencia o puntualidad al trabajo.
- La indisciplina o desobediencia en el trabajo.
- Las ofensas verbales o físicas al empresario o a las personas que trabajan en la empresa o a los familiares que convivan con ellos.
- La transgresión de la buena fe contractual, así como el abuso de confianza en el desempeño del trabajo.
- La disminución continuada y voluntaria en el rendimiento de trabajo normal o pactado.
- La embriaguez habitual o toxicomanía si repercuten negativamente en el trabajo.
- El acoso por razón de origen racial o étnico, religión o convicciones, discapacidad, edad u orientación sexual y el acoso sexual o por razón de sexo al empresario o a las personas que trabajan en la empresa.
¿El despido disciplinario da derecho a indemnización?
No, el despido disciplinario no genera derecho a indemnización. El empresario puede despedir al trabajador sin pagarle indemnización alguna, y además, sin darle un plazo de preaviso.
Sí tiene derecho el trabajador a cobrar el finiquito por aquellos conceptos que tenga pendientes de cobrar, como pueden ser las vacaciones a las que tuviera derecho y que no haya disfrutado. Y si cumple los requisitos para ello, podrá cobrar el paro.
¿Qué puede hacer el trabajador si no está conforme con el despido disciplinario?
Si el trabajador no está de acuerdo con el despido disciplinario, puede impugnarlo. Es habitual en muchas empresas despedir alegando causas disciplinarias, sin que realmente exista una causa justificada.
De esta manera, intentan ahorrarse la indemnización que correspondería al despido, y obligan al trabajador a reclamar si desea cobrar.
Una vez impugnado el despido, es la empresa quien tiene que acreditar la causa disciplinaria alegada para dicho despido. En muchos casos, los trabajadores consiguen ser indemnizados cuando se celebra el acto de conciliación, o tras celebrarse un juicio a raíz del cual, el Juez ha declarado el despido improcedente.
¿Cómo se impugna el despido disciplinario?
Para impugnar el despido disciplinario, es necesario presentar una papeleta de conciliación en un plazo de 20 días desde la fecha de efectos del despido. Se celebrará un acto de conciliación, encaminado a que el empresario y el trabajador lleguen a un acuerdo. Y en caso de que este no se consiga, se celebrará un juicio en el Juzgado de lo social.
Debemos destacar que si bien para presentar la papeleta de conciliación no es necesario contar con un letrado, sí es muy recomendable que este paso lo dé un abogado laboralista. Hay que tener en cuenta que si la papeleta contiene errores u omisiones, puede dificultar la posterior reclamación judicial.
¿Qué puede ocurrir si se impugna el despido disciplinario?
Una vez impugnado el despido disciplinario, es posible que el procedimiento termine en el acto de conciliación por haberse llegado a un acuerdo o que se tenga que celebrar un juicio, como hemos señalado.
Pues bien, algunos de los principales escenarios que pueden darse en este contexto son los siguientes:
Que la empresa proponga una indemnización la conciliación
Es posible que la empresa, al considerar que no tiene posibilidades de ganar el juicio, proponga una indemnización en el acto de conciliación. En este caso hay que prestar mucha atención a qué indemnización se ofrece, ya que quizás sea la equivalente a la de un despido improcedente, pero puede también ser inferior.
De ahí también la importancia de contar con un abogado laboralista en este momento, ya que este profesional puede analizar la viabilidad de conseguir una indemnización más alta.
Que el despido se declare improcedente en el Juzgado
Si se celebra un juicio y el Juez declara el despido disciplinario improcedente, el empleador tiene que escoger entre readmitir al trabajador o indemnizarlo. La indemnización sería de 33 días de salario por año de servicio, prorrateando los periodos inferiores al año y con un tope de 24 mensualidades.
También es posible que se aplique otro cálculo para parte de la indemnización, en función de la fecha de inicio del contrato. Tienes toda la información al respecto en este post.
Que el despido se declare procedente en el Juzgado
Cuando se celebra un juicio por despido improcedente, es el empresario quien tiene que acreditar la causa de dicho despido, y solo podrá hacerlo en caso de contar con pruebas para ello.
Si se da ese caso, y queda acreditada la razón del despido, el Juez lo declarará procedente. En ese caso, el trabajador no tendrá derecho a ser readmitido en la empresa o cobrar indemnización.